El Pregonero de Huéscar alza la voz.

Se hace saber que la información en Huéscar semana a semana la verán ustedes caer, que es lo que ustedes merecen y presuroso yo buenas noticias les daré, pues no es otra mi misión y encomienda que poner al día a tan exigente pueblo. Así que con todos ustedes me comprometo en servirlos y surtirlos de todo lo que ustedes deseen, siempre a través del texto y por supuesto añadiendo algo de verso a mi peculiar punto de vista tan presto.

A voz en grito, hasta desgañitarme proclamaré a los cuatro vientos lo que se mueve y se rumorea en los mentideros de nuestro pueblo, que para esto yo he nacido y gustoso acudiré hasta sus oídos. Aquí no hay sonrojo, ni vergüenza, ni tapujos, tan sólo verdad pura, dura y rabiosa. Verdad que puede que a algunos moleste, pues es bien sabido que la luz estorba al que se esconde, como la verdad al que vilmente miente. 

Sin nada más que decir el que os habla se despide quedando gustosamente a vuestra completa disposición, para que ustedes también me cuenten si quieren que algo por el galillo suelte, antes de pregonar importante es la escucha que con las pesquisas del contraste en buenas novedades resulta.